Es momento de actualización. Me dejé estar y
bastante. Las escusas: estuve de viaje, después estuve en un curso y he tenido
que apagar algunos “incendios” en el trabajo. Lo más destacable que hice en
este tiempo fue el viajecito que hice a Córdoba para las fiestas patrias.
Estuvo rebueno porque previo a esto, estuve en Santiago y viajé con Iván
(obvio) y la Pao. Le hicimos un tour por todas los lugares que la Pao nunca
había visitado, incluyendo el Mercado (el día que fuimos yo necesitaba urgentemente
tomarme una cazuela para recuperarme de la noche anterior), el barrio
Lastarria con visita incluida al cine el
Biógrafo donde vimos A Roma con amor (me
reí más de lo que me había imaginado así que no encontré la película tan mala
como decían). Hicimos las previas a las fiestas patrias en el Bar The Clininc y
fuimos a la fiesta Kitsch de la Blondie. Esto último estuvo genial, nos reímos
un montón bailando placeres culpables. Incluso bailamos música ranchera porque
tocaron en vivo los Hermanos Bustos.
Después de esto nos fuimos a Córdoba. La Pao
aquí no viajó con nosotros pero se juntó con unos amigos nuestros que igual
viajaron por si cuenta. Se recorrió casi todas las discos del ambiente.
Me encantó córdoba. En general es muy bonita.
El sector donde nos quedamos alojando, Nueva Córdoba, tiene un aire a Buenos
Aires. Y para qué hablar de los hombres… que manera de haber hombres lindos
allí, en su mayoría, todos con barbita. Un Paraíso.
No hice nada productivo aquí. Algo así como
que conocí lugares turísticos o muses, nada de nada. Ni siquiera saqué fotos.
Todo fue salir de shopping. Me recorrí el centro completo (eran horas y horas
de caminar todos los días) y creo que me faltó un solo mall por conocer. Es que
hay mucho comercio, pero mucho. A parte del centro, el sector de Nueva Córdoba
también está repleto de tiendas. Muchas son de diseñadores independientes, cosa
que me gusta harto.
No comí carne (no se mal interprete por
favor). Me faltó comer milanesas o bife de chorizo. En su lugar, comí pizzas
(no me acuerdo el nombre, pero hay un local donde comí sin mentir, la pizza más
exquisita que jamás haya probado), rabioles, y zapallitos italianos. De verdad
que cocinan muy rico, y en general, no es caro.
Lo único malo de Córdoba es que la vida
nocturna empieza recién el día jueves. Antes no hay nada, solo algunos pubs.
Alcancé a conocer un jueves Dorian Gray y el viernes, que fue el último día que
estuve, la ZEN. La primera es de música electrónica, pero no de esa electrónica
pop, sino de la electrónica casi minimalista. Era lo que había ese día. La otra
disco es gay 100%, con show incluido, y la verdad es que me gustó bastante. Lo
otro malo, y algo que es típico en Argentina y que habíamos olvidado, es que la
fiesta comienza muy tarde. Después de las 2:00. Nos pasó que el día jueves
antes de ir a la disco quisimos pasar a un Pub (gay también) al que llegamos
alrededor de las 12:00 y resulta que nos encontramos con la sorpresa que la
gente que trabaja allí estaba esperando a que les abrieran la puerta. Yaaaaa.
De ahí nos fuimos directo a la Disco y aún más sorpresas; estaba cerrada y los
guardias nos dijeron que abría a la 1:00. Tuvimos que hacer tiempo y resultamos
ser de los primeros en ingresar.
Creo que me faltaron un montón de cosas por ver,
así que espero repetir el viaje en algún momento.