Estaba escribiendo mi comentario sobre los
últimos (en realidad son de hace un buen tiempo) discos que estoy escuchando
cuando la semana antepasada me salió un viaje de último momento a Santiago.
Claro que por trabajo, pero aproveché a quedarme hasta el fin de semana.
Obviamente no me fui solo… por lo que salí medio trasquilado económicamente,
pero no importa, valió la pena.
Lo mejor del viaje fue que me coincidió con el
concierto de Suede. Me hubiera ido un día antes habría alcanzado el de Garbage
también. Ahí nada que hacer porque mi pasaje no lo compré yo. Pero Suede estuvo
genial (aclaro que es una de las bandas favoritas), no me esperaba que sonaran
tan potentes en vivo. Tanto Brett Anderson como el guitarrista Richard Oakes se
robaron la película. Si hay algo de Suede que me fascina, es precisamente como suenan
las guitarras, esa cosa como tan eléctrica que tiene. La foto es del concierto,
obviamente no la tomé yo. Como dato aparte, a Iván y a mí nos encantó su
camisa.
El que dio igual un mini concierto fue Alex
Anwandter (hace un tiempo comenté en algo su disco). Lo hizo la Ex Tantra, una
disco que no conocía pero que me gustó un montón (es de la onda). El concierto
igual estuvo bueno aunque muy corto, pero por lo menos cantó las canciones que
más me gustan.