ual tenía pendiente invitar a la tía Teru. Así que finalmente el sábado pasado organicé un coctel para la ocasión. Había pensado en una cena, pero hubiera sido imposible hacerla ya que mi casa no es taaan grande y mi mesa es para 8 personas no más. Fuimos 15, por lo que no iba a tener donde meter a los demás. La solución... hacerlo tipo coctel, con anticuchos (la idea original era parrillada), empanadas y pizza, y así, de esta manera, los podía repartir entre el living y el comedor.Mi viejo hizo los anticuchos pues con Iván somos nulos para hacer estas cosas (muy hetero para nosotros, jajaja). Las empanadas las mandamos a hacer y mi abueja trajo la pizza.
Así que estuve de anfitrión con ayuda de mi vieja. Iván colapsa con estas cosas así que no fue de mucha ayuda, pero se encargó de meter cháchara.
Estuvo piola, igual terminamos temprano, al rededor de las 12 y media. Quedé contento porque resultó todo bien y además que sirvió de reencuentro para todos.
2 comentarios:
Siempre juntarse con la flia. es motivo de alegría. Es una bendición que no muchos tienen, así que, tienes que ser agradecido.
Me alegro que haya salido bien la inaguración, aunque fue sólo el pretexto, pero lindo pretexto, para compartir con tus seres queridos.
Cariños.
Fue buena idea ese tipo de comida aunque no se que son los anticuchos.
Es bonito organizar los encuentros, son momentos festivos que resultan bien.
Ahora deberán hacer inauguración formal con amigos.
Publicar un comentario