Nos juntamos a tomar once en la casa, un poco tarde eso sí, porque fue como a las 8 de la noche. Vino también la tía Teru, la tía Sandra (tía de la Muñocito) y mi mamá.
Y al fin pudimos conocer a Jeffrey, el esposo de la Muñocito. . Muy buena onda; es músico y tiene un programa en una radio de música alternativa. Así que como imaginarán sintonizamos al tiro; es inglés y lógicamente es fanático de los Beatles. Ahí estuvimos hablando un rato mientras escuchábamos el Revolver. Cuando terminó le traje mas discos (de los que tengo en casa porque la mayoría están donde mi viejos), para que eligieran junto con la Muñocito. Le pareció muy cool ver que me gusta Sonic Youth (le parecí muy neoyorquino porque por ahí andaban unos discos de Beck y de la Velevet Underground). La Muñocito le contaba que yo "era el tipo por el cual ella conoció a Janis Joplin, Pink Floyd y Nirvana"... esto ya hace muuuucho tiempo. De paso, nos estuvimos acordando igual de cosas antiguas: de las fiestas que haciamos en casa de mis viejos en las que se llenaba de gente, y de la vez (esto no es tan antiguo) en que salimos con los chicos y Ella les convidó un pito, el que se fumaron en el baño de la disco.
Estuvimos hasta tarde; bueno había que aprovechar el momento porque hoy partían rumbo a Santiago. Pero fue muy grato todo el reencuentro y saber que la Muñocito está bien por allá y bien acompañada también. Quedamos todos contento. Y bueno, ahora habrá que programarse con viajecito para esos lados, claro que de aquí como a unos dos años más, cuek!... para juntar plata.
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